Introducción

Desde hace unos años nos enfrentamos a una serie de cambios sociales, políticos, científicos, tecnológicos, así como numerosas reformas educativas que hacen que los procesos y procedimientos que actualmente utilizamos se queden obsoletos. Por ello, es necesario una continua formación docente que nos permita adquirir las herramientas básicas para poder afrontar con éxito las nuevas demandas educativas. 

Entre todos estos nuevos paradigmas hallamos uno que presenta un gran hueco en el mundo educativo: las competencias clave. Un modelo educativo basado en competencias permite llevar a cabo un proceso de enseñanza-aprendizaje donde se tiene como fin último el desarrollo integral del escolar en todas las áreas circunscritas. 

Trabajar mediante competencias permite crear situaciones de enseñanza donde los alumnos se convierten en los propios protagonistas del proceso educativo, generando una fuerte autonomía, motivación e iniciativa por seguir aprendido. Asimismo, incentivar el aprendizaje por competencias va a fomentar la adquisición de una serie de estrategias y habilidades cruciales para su vida diaria.

Pero, ¿cómo podemos trabajarlas en el aula? A partir de este post se darán una serie de ideas sobre cómo se pueden llevar a cabo el desarrollo de las mismas en clase.

¿Qué son las competencias?

     En primer lugar, es necesario comprender qué es una competencia. Debemos saber que estas forman parte del currículum educativo,definiéndose como aquellas capacidades para aplicar de forma integrada los contenidos propios de cada enseñanza y etapa educativa, presentando la finalidad de llevar a cabo de manera eficaz las actividades que se plateen en el aula, además de resolver correctamente todos aquellos problemas complejos que presentemos a nuestros alumnos. Por tanto, las entendemos como aquellas estrategias y habilidades necesarias que los discentes tienen que adquirir. 

     Las competencias básicas se dividen a su vez en siete diferentes, entre las que encontramos:

Es necesario trabajarlas de manera adecuada para potenciar en el alumnado un desarrollo óptimo del proceso de aprendizaje, siendo requisito imprescindible el contar con una serie de recursos y estrategias docentes que permitan llevar a la práctica todas aquellas actividades que fomenten el desarrollo de las presentes competencias. 

Pero, ¿cómo lo podemos hacer?

¿Cómo podemos trabajar las competencias en nuestro aula?

Para poder desarrollar adecuadamente cada una de las competencias es necesario saber qué es lo que se debe trabajar en cada una de ellas. Sin embargo, la mejor forma de conocerlo es mediante la exposición de ejemplos; por ello, a continuación trataremos de explicarlas y ejemplificarlas de la mejor manera posible:

• Competencia lingüística: por medio de ella pretendemos que los alumnos sean capaces de expresarse tanto de manera oral como escrita, participando en situaciones comunicativas críticas y constructivas. Por ello, la mejor forma de trabajarlo sería a través de cuentos, obras de teatro, juegos de rol, técnicas como brainstorming, Philips 6/6, etc.
• Competencia matemática y competencia básica en ciencia y tecnología: los alumnos han de ser capaces de resolver adecuadamente los problemas que se les plateen, así como utilizar los procedimientos y procesos numéricos en su vida cotidiana, por lo que la mejor forma de trabajarla sería a través de puzzles, establecimiento de hipótesis, a partir de la presentación de algún problema, robótica, etc.
• Competencia de aprender a aprender: es necesario hacer que el alumno se sienta el propio protagonista de su aprendizaje, por lo que el trabajo por proyectos se convierte en una herramienta esencial para potenciar esta competencia, donde los alumnos tengan que resolver por ellos mismos las tareas que se presentan y llegar al conocimiento por sí mismos. 
• Competencia digital: las Tecnologías de la Información y la Comunicación (TIC) se han convertido en el complemento perfecto para llevar a cabo el proceso educativo; por ello, trabajar a partir de diversas plataformas como Web Quest o aplicaciones como LIM permitirán que los alumnos tomen conciencia de la importancia que presentan estas en su proceso de aprendizaje, además de adquirir una responsabilidad en el uso correcto de las mismas.
• Competencia social y cívica: las normas de comportamiento social son fundamentales para que los alumnos sepan vivir en sociedad, siendo además necesario que aprendan a establecer juicios correctos, sin juzgar a las personas y respetando la diversidad presente. Por ello, trabajar diversas culturas presentes tanto en el centro educativo como en la sociedad en la que viven será primordial para potenciar dicha competencia.
• Competencia sentido de la iniciativa y espíritu emprendedor: es bien sabido que los niños deben aumentar su autonomía e iniciativa a la hora de emprender cualquier actividad, pero no siempre es fácil conseguirlo. Las TIC’s permiten que los niños desarrollen estas características al tener que estar tomando constantes decisiones sobre la información que han de elegir, filtrar y seleccionar para poder conseguir el objetivo planteado. 
• Competencia herencia y expresión cultural: es fundamental que los infantes conozcan aquellas expresiones culturales y festividades propias de la comunidad en la que viven; por tanto, llevar a cabo proyectos educativos sobre estas permitirá fomentar la sensibilidad de los niños hacia ellas, además de poder tener un contacto directo con las mismas a través de excursiones, fomentando así su aprendizaje significativo. 

Conclusión

En definitiva, trabajar las competencias permitirá que la escuela responda de manera eficaz a las nuevas demandas acontecidas, además de conseguir desarrollar en una niños una capacidad de autonomía y decisión en las distintas áreas educativas, pues como bien dijo Piaget «el principal objetivo de la educación es crear personas capaces de hacer cosas nuevas y no simplemente repetir lo que otras generaciones hicieron».

Como conclusión, mostrar un breve vídeo aclaratorio de los que hemos tratado en este artículo.